5 señales de que tu moto necesita una revisión urgente

Tu moto se comunica contigo… aunque no hable. A veces lo hace a través de un ruido nuevo, una vibración extraña o simplemente no rinde como debería. Estar atento a ciertas señales puede ahorrarte tiempo, dinero y, sobre todo, evitar riesgos innecesarios en carretera.

Aquí te contamos las 5 alertas más comunes que indican que tu moto necesita pasar por el taller cuanto antes:

1. Ruidos extraños que antes no estaban

¿Tu moto ha empezado a “decir cosas” con sonidos que nunca habías oído? Escúchala con atención.

• Chirridos al frenar: suelen deberse a pastillas desgastadas o mal alineadas.
• Golpeteos metálicos: pueden estar relacionados con problemas en la transmisión, el embrague o piezas sueltas en el motor.
• Zumbidos o chillidos al acelerar: podrían señalar fallos en los rodamientos, la transmisión secundaria o la cadena.

👉 Un ruido nuevo nunca es “normal”. Más vale investigarlo a tiempo antes de que acabe en avería seria.

2. Pérdida de potencia

¿Notas que tu moto no acelera como antes? ¿Se ahoga o responde con lentitud al girar el puño del gas?

Algunas posibles causas:

• Filtro de aire sucio o taponado.
• Fallos en la inyección o carburación.
• Bujías en mal estado.
• Combustible contaminado o de baja calidad.

👉 Una moto sin potencia no solo pierde rendimiento, también puede poner en peligro tu seguridad al adelantar o subir puertos.

3. Dificultad al arrancar

¿Tu moto tarda en arrancar? ¿Necesitas varios intentos o directamente no responde?

Estas son algunas causas frecuentes:

• Batería descargada o deteriorada (sobre todo si tiene más de dos años).
• Bujías gastadas, que ya no producen chispa con eficacia.
• Problemas eléctricos, como cables dañados o conexiones defectuosas.
• En motos carburadas: chiclé obstruido o estrangulador en mal estado.

👉 Si arrancar se convierte en una lotería, es hora de revisar a fondo el sistema de encendido.

4. Vibraciones inusuales

Es normal que una moto vibre, pero si las vibraciones cambian, se intensifican o aparecen de golpe, hay que prestar atención.

Posibles causas:

• Neumáticos mal equilibrados o deformados.
• Llantas descentradas o con radios flojos.
• Rodamientos desgastados (en ruedas o dirección).
• Desalineación de ejes o defectos en la suspensión.

Además de incómodas, las vibraciones pueden afectar seriamente la estabilidad de la moto.

👉 ¿Notas temblores en el manillar o en los estribos a cierta velocidad? No lo ignores. Puede ser un aviso de avería inminente.

5. Frenos que no funcionan como antes

El sistema de frenos es tu principal recurso de seguridad. Cualquier variación en su comportamiento debe ser tomada en serio.

¿Te pasa alguna de estas cosas?

• Necesitas apretar la maneta o el pedal con más fuerza.
• El freno “se va al fondo” o tiene un tacto esponjoso.
• Se oyen ruidos metálicos al frenar.
• La moto no frena recto o se desvía hacia un lado.

Podría deberse a:

• Pastillas o zapatas desgastadas.
• Líquido de frenos bajo o en mal estado.
• Discos deformados.
• Aire en el circuito hidráulico.

👉 No esperes a que los frenos fallen. Si notas algo raro, actúa de inmediato.

⚠️ Consejo final:

Si detectas aunque sea una sola de estas señales, no lo dejes pasar. Llevar tu moto al taller a tiempo puede evitar una avería mayor y, lo que es más importante, puede salvarte la vida.

📍 En nuestro taller:

Realizamos diagnósticos completos para identificar cualquier problema, por mínimo que sea. Tu seguridad es nuestra prioridad, y cuidamos tu moto como si fuera la nuestra.

¿Notas algo raro en tu moto?
No lo dejes para más tarde. Pide cita hoy mismo y sal a rodar con tranquilidad.